sábado, 13 de junio de 2009

Cuando los GATOS se van al cielo


...no necesitan alas porque Dios sabe que ellos prefieren correr...

El les da campos, campos, campos y campos. Cuando recién llegan al cielo sólo corren. Es la Libertad.
El paraíso de los gatos tiene lagos grandes, de aguas claras, llenos de gansos que cantan, que baten sus alas y juegan. A los gatos les encanta; corren al lado del agua .... y Dios los mira desde atrás de un árbol y sonríe.
Allí hay niños, por supuesto, niños ángeles. Dios sabe que los gatos aman a los niños más que a nada en el mundo, por lo tantoEl llena el Paraíso de los Gatos con muchos niños. Hay niños en bicicletas y niños en patines.
Hay niños arrojando una pelota roja y niños elevando barriletes a través de las nubes. Los gatos están allí y los niños los aman.Ah! y las galletas de gatos .... Galletas y más galletas, tantas como podamos ver. Dios tiene sentido del humor y hace galletas con divertidas formas para Sus gatos. Hay galletas con formas de pescaditos, de ardillas, de conos de helado, de sándwich de salmón.
El da vuelta hacia afuera las nubes para hacer camas blanditas para los gatos y cuando están cansados de correr y maullar y de comer galletas de sándwich de salmón, encuentran una cama de nubes para dormir, entonces se acurrucan y duermen y hacen ron ron.
Los Gatos en el Paraíso casi siempre han pertenecido a alguien en la Tierra y, por supuesto, ellos lo recuerdan. El Paraíso está lleno de recuerdos. Por eso a alguna vez un ángel llevará un gato de vuelta a la Tierra en una corta visita, y silenciosamente, invisiblemente, el olfateará su antiguo patio, investigará al perro del vecino, seguirá al niño hasta la escuela, se sentará en el frente de su casa y esperará al cartero.
Cuando esté satisfecho de que todo está bien, ellos regresarán al Paraíso, cerca de Dios que es Quien los hizo.

Los Perros en la pasarela

Dos de los desfiles de las pasarelas de Madrid y Milán han coincidido al acompañar a algunas de las maniquíes de perros de grandes dimensiones y acicalados para la ocasión.

El primero en sorprender con uncaniche gigante con el pelo teñido de rosa fue el español Jesús del Pozo en la apertura de la pasarela Cibeles.

El caniche de pedigree se sometió incluso a sesiones de peluquería para poder pisar las tablas y conjuntar con los diseños exhibidos.

Milán ha salido a la zaga de Cibeles en su tercera jornada. La firma Trussardi presentó una colección con cierta atmósfera colonial, inspirada en la década de los veinte, imponiendo como emblema de su colección la chaqueta sahariana tanto para el día y como para la noche.

Qué menos que acompañar a estas mujeres dignas de memorias de África con un perro cazador de raza Galgo que ha paseado su palmito, casi con la misma gracias que sus portadoras